La idea de una bebida prohibida a los hombres nos remite al mito de los nahuas, en efecto antes de ser sacrificado por Tezcatlipoca, el pulque de "Ome Tochtli" (Dios del pulque) provocaba la muerte  de los hombres y el vinagre ofrecido a jesucristo era un veneno La crucificción de jesucristo tiene la misma consecuencia que el sacrificio voluntario de "Ome Tochtli" el pulque letal y el vinagre mortal se transforman en bebidas que los hombres podrán consumir. Esta nesecidad de la muerte como paso obligado antes de un proceso de creación es muy común en los mitos mesoamericanos. El nacimiento del maguey sigue esta regla. Se dice que Quetzalcóatl raptó en el cielo a una diosa llamada Mayahuel, quien una vez en la tierra, se transformó en un árbol florido. Las tzitzimime la descubrieron y la hicieron pedazos. Quetzalcóatl recogió los huesos de la diosa y los enterró. De ellos nació el maguey del cual se hace el pulque.

Entonces , si Tezcatlipoca inmortalizó a Ome Tochtli sacrificandole, se puede proponer que, al emborrachar al rey de Tollan, Tezcatlipoca contribuyó al renacimiento de Quetzalcóatl-Venus. La intoxicación alcohólica en los mitos designa entonces como transgresores a los vencidos del eterno conflicto que se libra entre Quetzalcóatl y Tezcatlipoca, de ahí que la embriaguez represente una etapa imprescindible en el camino recorrido por las deidades del México antiguo, desde la muerte hacia el renacimiento.